Buenas...

Leedme si queréis, no os obligo.

miércoles, 5 de diciembre de 2012

Y aún así les sigues culpando.


Las paredes no tienen la culpa
de que te quieras matar por dentro.
Las paredes no tienen la culpa
de que no sepas decir ni lo siento.

Tu mano no tiene la culpa
de lo que hace el resto de tu cuerpo.
Tu mano no tiene la culpa
de que vaya regalando besos.

Tu mente no tiene la culpa
de que por ahí no aparezca tu ego
Tu mente no tiene la culpa
de que tu ello no se sepa estar quieto.

Tu mundo no tiene la culpa
de que la vida no esté sonriendo.
Tu mundo no tiene la culpa,
y aún así quieres verle muerto.